COMUNA:

 

            Muchas veces, si el itinerario a cumplir preveía destinos distantes, tanto el personal de máquina como los guardatrenes contaba con viviendas de descanso, que llamaban "casa de todos o comunas". Allí tenían todo lo necesario para alojarse y preparar sus alimentos.

Se trataba de asociaciones civiles que funcionaban con una comisión.

Todos los que hacían uso de las COMUNAS debían abonar una mensualidad.

Estas casas contaban con un Reglamento muy rígido, que de no cumplirse, preveía "observaciones" o "suspensiones".

La casa propiamente dicha, podía ser propia (como en el caso de Huanguelén o General Lamadrid) o alquilada (como en Olavarría o Coronel Suárez).

Muchas veces podía haber intercambio y personas de otras líneas hospedarse en estas comunas.

En el caso de que no hubiera Comuna en el lugar donde habían dejado el servicio, los maquinistas y foguistas iban a un hotel y luego la comuna les reintegraba el dinero.

Las CASAS en Saavedra fueron propuestas por Francisco Di Soma. En un principio se alquilaron viviendas amplias. Con los años también fueron propietarios de las mismas.

En Recalde o Ingeniero White paraban en las colonias del ferrocarril.

​